Saludos de nuevo desde Cantabria. Retomo de nuevo mis aventuras con las gentes de Naturea. Hoy me desplazo a un lugar ya conocido pero a una ruta desconocida. Es una ruta bastante sencilla de casi 17 km y 300 metros de desnivel. Pero ojo! el nombre de la ruta puede confundir y pensar que iremos solo por la orilla del rio y no es asi. Esta ruta rodea y asciende el monte Engaña para visitar la malograda obra de ingeniería del corredor ferroviario Santander-Mediterráneo, primero ascendiendo por el arroyo Aján y luego descendiendo por el río Yera.
Comienzo la ruta a las 10:00 desde la plaza de Vega de Pas, dónde nuestro guía Oscar está encantado ya que tiene un lleno total: 16 personas de muy diferente perfil recorremos juntos la ruta. Salimos por la carretera del puerto de Estacas de Trueba y rápidamente la abandonamos para remontar el precioso cauce del río Yera, que llama la atención por sus numerosos puentes de piedra para acceder a las cabañas pasiegas y los saltos, pozas y su limpio cauce
Seguiremos adelante saliendo alguna vez a carretera para de nuevo internarnos a orillas del Yera, en dirección al monte Engaña, transitando por caminos pegados a las cabañas pasiegas. Oscar nos da una lección de historia y nos explica la vida pasiega, sus típicas cabañas y su estilo de vida, junto a una de las cabañas que mejor conserva todos los elementos en la que además podemos ver como trabajan sus inquilinos.
Llegamos a un cruce dónde abandonamos el Yera y empezamos a remontar el arroyo Aján, de una forma tan espectacular como preciosa. Nos desviamos un poco del sendero y descendemos a su cauce dónde podemos oir como están practicando barranquismo. Oscar nos muestra una poza que es una auténtica maravilla, que invita a a relajarse
Volvemos a ascender con cuidado de no resbalar y seguimos por el sendero principal, atravesando bosquetes de Alisos, sauces, Fresnos y otras especies arbóreas típicos de ribera hasta cruzar el arroyo y abandonarlo definitivamente para ascender de forma brusca lo que nos queda del monte y llegar al enorme complejo de barracones de presos, que construyeron la obra que veremos a continuación. Aunque el edificio permanece como unas fantasmagóricas ruinas, se puede apreciar como debería ser la vida de estos trabajadores forzados que durante la época franquista, horadadon las entrañas de la tierra para abrir un paso entre las merindades burgalesas y la costa cántabra. Muchos de ellos murieron por desprendimientos o silicosis
A partir de aquí llanearemos un poco siguiendo el camino que hubiera sido la vía férrea y tendremos que atravesar 3 túneles hasta llegar a la estación de Yera: El Mayoral, el Morro y el Morrito. Ninguno de ellos supera los 200 metros, aunque en uno de ellos al estar en curva nos obliga a caminar en total oscuridad unos metros.
Cuando salimos del último túnel, algo nos empieza a llamar la atención a todos. El piso se alisa y eleva aparecen rastros de un cuidado adoquinado. Hemos llegado a la impactante estación de Yera. Una obra de ingeniería de primera. La estación cuenta con un edificio de pasajeros, otro de carga y una residencia de ingenieros, siendo éste último el único utilizado ya que la estación nunca fue utilizada, de hecho ni siquiera llegaron a colocarse las traviesas.
Contar que este corredor llamado Santander-Mediterráneo arrancaba en el puerto de Sagunto aprovechando un tramo ya construido en su época (lo que ahora es la vía verde de Ojos Negros) hasta Calatayud. Otro tramo se construyó hasta Burgos. Sin embargo el último que debería atravesar la cordillera cantábrica provocó muchos problemas. Hasta 3 proyectos se presentaron y finalmente se opto por éste. Sin embargo no consiguió hacerse realidad. Aunque Franco impulsó su construcción, el túnel más largo y complejo, el de la Engaña con casi 7 km (el más largo en la época) costó 17 años en completarse y aunque se construyeron las estaciones en ambos lados, no hubo presupuesto para nada más, así que toda esta obra quedó como un túnel fantasma. Su único uso real, fue para camioneros que cuando se cerraba el puerto del Escudo por nevadas, circulaban por él hasta que el túnel se vino abajo y quedó impracticable. Hoy podemos ver lo que hubiera sido esta estación, un bello complejo levantado sobre la montaña por un sistema de pilares de mas de 50 metros sobre el valle
Volvemos al cruce del principio y echando la vista atrás vemos el monte Engaña al que nos hemos encaramado y ya sólo queda regresar por el mismo camino hasta Vega de Pas y tras una buena despedida con todos los compañeros y guía iniciamos el regreso cada uno a su casa
Y eso es todo. Gran día, gran ruta y gran compañía. Muy buen rollo con todos y agradecimiento a Óscar por darnos estas grandes lecciones de historia.
La semana que viene más
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